Las relaciones personales en el entorno laboral son un factor clave que afecta tanto al rendimiento como al bienestar emocional. Lamentablemente, no siempre es fácil navegar estas interacciones, especialmente cuando te enfrentas a compañeros tóxicos. Saber cómo identificar y manejar estas situaciones es crucial para mantener un ambiente de trabajo saludable y productivo.
El primer paso para lidiar con la toxicidad en el trabajo es aprender a identificarla. Según Elisa Sánchez, psicóloga y coordinadora del grupo de salud laboral del Colegio de Psicólogos de Madrid, "una situación tóxica se manifiesta cuando sentimos emociones desagradables como ansiedad, frustración, impotencia o miedo al interactuar con ciertos compañeros". Estas emociones son señales de alerta que indican que estás lidiando con una relación laboral insalubre.
Amparo Calandín, psicóloga y CEO de Amparo Calandín Psicólogos, sugiere que la clave para identificar a personas tóxicas es prestar atención a cómo te hacen sentir. "Si su presencia te incomoda, te pone nervioso o cambia tu estado de ánimo de manera negativa, es probable que estés interactuando con alguien tóxico", explica. Este cambio en tu comportamiento y emociones puede ser un indicio de que la relación está afectando negativamente tu bienestar.
Algunas estrategias para lidiar con compañeros tóxicos
Una vez que has identificado a un compañero tóxico, es esencial saber cómo manejar la situación de manera efectiva. Tanto Sánchez como Calandín coinciden en que la asertividad y la distancia son las mejores herramientas para combatir la toxicidad en el entorno laboral.
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Establecer límites
Calandín aconseja marcar límites firmes y mantener una actitud indiferente hacia los comportamientos tóxicos. "Limita la comunicación con ellos a lo estrictamente necesario y evita entrar en discusiones. Sé asertivo al expresar tus ideas, de manera que no puedan manipularte o llevarte a su terreno", recomienda.
Manteniendo la distancia
Cuando es difícil mantener la distancia física en el trabajo, busca alejarte durante los descansos o la hora de la comida. Además, el distanciamiento mental es crucial para no permitir que los comportamientos tóxicos afecten tu paz interior. Sánchez sugiere evitar pensamientos obsesivos sobre el compañero tóxico y no asumir que sus acciones están dirigidas específicamente hacia ti.
No dejarse arrastrar
Es fundamental no permitir que la negatividad de un compañero tóxico te afecte. Calandín sugiere enfocar tu atención en aspectos positivos del trabajo, como las tareas que disfrutas y las relaciones con compañeros que son amistosos y solidarios. "Pon límites, evita entrar en su juego y mantén la confianza en ti mismo", añade.
Buscar apoyo externo
Si el comportamiento tóxico persiste y afecta gravemente tu rendimiento o bienestar, considera activar un protocolo de gestión de conflictos en tu empresa. Un mediador externo puede ayudar a manejar la situación de manera más objetiva y efectiva.
Desconectar para reconectar
Finalmente, es importante desconectar del trabajo al final del día. Ambas psicólogas enfatizan la importancia de no llevar los problemas laborales a casa. Participa en actividades relajantes y que disfrutes para recuperar tu equilibrio emocional y minimizar el impacto de las relaciones tóxicas en tu vida personal.