La capacidad de atención ha disminuido drásticamente en las últimas dos décadas, y no es una sorpresa. Un estudio reciente revela que el tiempo medio de atención sostenida ha pasado de 150 segundos en 2004 a solo 45 segundos en 2021, lo que supone una disminución del 70%. Este fenómeno se ve agravado por la multitarea, una práctica común pero engañosa. Lo que se produce cuando ves la televisión y estás con el móvil al mismo tiempo es simplemente un cambio de tareas: estás activando y desactivando tu atención en una actividad en particular.
Los teléfonos móviles y las redes sociales están diseñados para capturar y retener la atención del usuario, creando un ciclo adictivo similar al de las máquinas tragaperras. El scrolling en redes desencadena la liberación de dopamina, una hormona asociada al placer, lo que explica por qué es tan difícil dejar el móvil de lado. Para combatir este ciclo de sobreestimulación, psicólogos proponen realizar actividades no digitales mientras se ve la televisión, como tejer o bordar, que ofrecen beneficios cognitivos y emocionales. Las tareas no digitales son mejores que hacer scrolling porque es menos probable que inunden tu sistema nervioso y te sobreestimulen.
Psicólogos sugieren que estas actividades, como el crochet o el bordado, no solo son una alternativa más saludable al scrolling, sino que también ayudan a reforzar las capacidades neuromotoras sin desencadenar la misma intensa liberación de dopamina. Además, estas prácticas pueden ser una manera creativa y relajante de producir algo tangible, como ropa hecha a mano, lo que añade un valor adicional a la experiencia.
Para aquellos que no se ven tejiendo bufandas, proponen otras alternativas sencillas pero efectivas para mantenerse atentos y evitar el sedentarismo mientras se disfruta de una serie o película. Colorear mandalas o realizar miniestiramientos son dos opciones que pueden ayudar a mantener la atención en la trama, al mismo tiempo que se promueve la salud física y mental.