La yerba mate es una planta ancestral típica de América del Sur y compartida en el resto del mundo, que desde sus comienzos ha causado cierta polémica: incluso al día de hoy se sigue dando un debate sobre su verdadero origen entre Chile, Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil. Sin embargo, más allá de esta discusión, hay un consenso unánime: el mate es el tesoro más preciado de la población del hemisferio sur.
Desde tiempos inmemoriales, la yerba mate ha sido vista como un “don de los dioses”, tanto por los pueblos originarios como por las generaciones posteriores que aprovechan sus beneficios físicos y sociales. Y si bien su uso es una práctica cotidiana entre los países mencionados anteriormente, aún guarda secretos que sorprenden incluso a los más fervientes fanáticos del mate.
La yerba mate no sólo acompaña las mañanas, jornadas laborales o momentos de convivencia de millones de personas alrededor del mundo, sino que también nutre nuestro organismo y tiene incontables beneficios para la salud. La bebida que sale de su infusión es reconocida en el mundo científico por su acción diurética, descongestiva y su contenido saludable de cafeína, capaz de energizar a cualquiera. Además, tiene propiedades antimicrobianas que fortalecen el sistema inmunológico.
Pero sus virtudes no se detienen ahí. La yerba mate, correctamente infusionada, puede contribuir a reducir el colesterol, regular los niveles de azúcar, aliviar la inflamación crónica y reducir la fatiga. Es prácticamente un elixir milagroso, y así es considerado en los países en los que más se utiliza. ¡Es hora de que tú también te animes a conocer el mate y hacer de esta infusión un aliado en tu rutina saludable de todos los días!