Mantener la iniciativa y el entusiasmo en nuestro día a día, aun cuando suframos algún revés, o cuando las cosas no nos estén saliendo del todo bien, es de vital importancia para todas las personas. De alguna manera, explica la psicología, la motivación es como un combustible que nos permite afrontar nuestros desafíos diarios. ¡Y claro que siempre es necesario tener combustible!
Los especialistas explican que la motivación puede ser extrínseca o intrínseca. La primera de ellas se refiere a la expectativa de recibir una recompensa al finalizar algún tipo de actividad. Mientras tanto, la segunda, según manifiestan los expertos del ámbito de la psicología, se refiere a la autosatisfacción, que podemos sentir, por ejemplo, cuando aprendemos a tocar un instrumento. Pero, más allá de estos pormenores, ¿de qué forma podemos mantener la motivación cuando sentimos que la vida nos da la espalda?
Los trucos de la psicología: las metas y los obstáculos
La psicología nos ofrece varios trucos de relevancia para mantener la motivación. Uno de los más importantes se vincula con las metas: es importante que establezcamos objetivos realistas en nuestro día a día, para evitar frustraciones innecesarias, y apuntando a siempre tener vinculación con cosas que nos interesen genuinamente.
La planificación de nuestros pasos a seguir es especialmente relevante, para no sentir que los objetivos que estamos siguiendo jamás llegarán. Además, en particular, la psicología indica que es importante trabajar en la anticipación de obstáculos, para que un pequeño inconveniente no se convierta, en nuestra mente, en un abismo insuperable.
La positividad y la disposición al cambio para la motivación
Otro punto importante que explica la psicología es la necesidad de identificar las causas de nuestra desmotivación. Si nuestro trabajo nos frustra, quizá sea hora de pensar en un cambio, al menos de área, o, incluso, de trabajo en sí. Al mismo tiempo, si sentimos que le falta vitalidad a nuestra vida social, podemos buscar nuevos amigos o hobbies. Lo importante es atender a nuestras necesidades con creatividad para despertar el entusiasmo interior.
Además, la recomendación más extendida es trabajar en la positividad, para aprender de los errores y no quedar enfrascados en ellos. Cuando las cosas se complican, las quejas son inevitables, ¡pero no pueden ocupar toda nuestra mente! Con estos tips, mantener la motivación será mucho más factible para ti.
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