El champú sólido está revolucionando el mercado de los cosméticos, convirtiéndose en una opción sostenible tanto para el planeta como para nuestro cabello. Con fórmulas más limpias y menos envases de plástico, estos productos han conquistado nuestros baños, ofreciendo una alternativa ecológica y práctica a los champús tradicionales. Pero, ¿qué es exactamente un champú sólido y por qué deberíamos elegirlo?
Fabricado a partir de una mezcla de tensioactivos, aceites y fragancias, el champú sólido tiene el aspecto de un jabón, aunque no contiene jabón en sí. En España, se consumen anualmente 174 millones de botellas de champú convencional, la mayoría de las cuales terminan en la basura. Los champús sólidos, envueltos en papel, no producen residuos plásticos y pueden utilizarse hasta la última pieza.
Además de ser ecológicos, los champús sólidos son económicos. Un pequeño formato de champú sólido equivale a dos botellas de champú líquido, prolongando su uso al pegar las piezas que se van reduciendo en la jabonera. "Adoptar un champú sólido es participar en un estilo de vida con cero residuos y ecorresponsable", explican expertos en sostenibilidad. También es fácil de transportar gracias a su tamaño compacto, ideal para viajes, ya que no solo ocupa menos espacio, sino que también pasa sin problemas los controles de seguridad en aeropuertos.
Existen dos maneras de lavarse el cabello con un champú sólido: frotándolo en las manos y aplicando la espuma en el cuero cabelludo, o directamente en el cabello húmedo con movimientos circulares. Al trabajar el material, se forma una espuma que se puede masajear y aclarar. Es importante mencionar que al dejar de usar productos que dañan el cabello, como los que contienen silicona, el cuero cabelludo pasa por un periodo de transición donde se adapta a los nuevos ingredientes y reajusta su barrera protectora.
Maud, una activista medioambiental, está llevando a cabo el reto "Julio sin plástico", un movimiento mundial para luchar contra la contaminación por plástico. Ella comparte activamente consejos sobre cómo reducir el consumo de plástico a través de su comunidad y su asociación Save La Mermaid. "100,000 animales marinos mueren asfixiados por el plástico cada año", señala Maud, subrayando la importancia de adoptar hábitos más sostenibles y responsables.