Antes de que el rey emérito Juan Carlos decidiera casarse con Sofía de Grecia, conoció a dos mujeres que marcaron su juventud: la condesa Olghina de Robilant, su primer amor, y la princesa María Gabriela de Saboya. Hoy, trascendió la noticia del fallecimiento de una de ellas, y ha tenido que decirle adiós.
A los 87 años, Olghina de Robilant ha fallecido en Italia. La condesa fue uno de los grandes amores de la juventud de rey emérito Juan Carlos y una de las personalidades más destacadas de la sociedad italiana. La condesa fue también actriz y mantuvo varios romances con personajes del cine y la cultura internacional como Tony Curtis, Alain Delon, Ernest Hemingway o Truman Capote.
No obstante, su primer amor fue el rey emérito. Olghina y Juan Carlos se conocieron en Portugal en 1956: “me enamoré como una colegiala. Era una relación alegre y simpática, sin compromisos”, relató la condesa en 2014 cuando le preguntaron por su vinculo con el padre del rey Felipe VI.
Sin embargo, su amor no pudo ser. Por lo que Olghina se marchó a Roma donde hizo su vida, tuvo a su primera hija, Paola, a los 25 años, de quien nunca se reveló la identidad del padre. Posteriormente, se casó con el pintor Antonello Aglioti, quien es padre de su segunda hija, Valentina.