El verano de 2024 ha sido especialmente significativo para la Familia Real española. Tras una serie de apariciones destacadas en los Juegos Olímpicos de París, el Rey Felipe VI, la Reina Letizia, la Princesa Leonor, y la Infanta Sofía regresaron a Mallorca para disfrutar de un merecido descanso en el Palacio de Marivent. Sin embargo, este período de tranquilidad no durará mucho, ya que se avecinan importantes cambios para las hijas de los monarcas.
La Princesa Leonor, de 18 años, ha asumido un papel más destacado que nunca. Este verano, lideró su primer viaje de Estado en solitario a Portugal, marcando un hito en su formación como futura Reina de España. Junto a su hermana Sofía, de 17 años, Leonor también representó a la Corona en varios eventos en París, demostrando la confianza que sus padres han depositado en ellas.
Con la inminente vuelta a sus compromisos académicos y militares en el extranjero, Felipe y Letizia han tomado la decisión de reducir temporalmente sus actos oficiales para pasar más tiempo en familia. La próxima semana, la agenda real no contempla eventos públicos, lo que permitirá a la familia disfrutar de sus últimos días juntos antes de que Leonor retome su formación militar y Sofía se prepare para sus próximos desafíos educativos.
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Este descanso en la agenda oficial no significa, sin embargo, que el Rey Felipe y la Reina Letizia estén completamente fuera de servicio. Están preparados para atender cualquier asunto urgente que surja, pero por ahora, la prioridad es compartir tiempo de calidad con sus hijas antes de que ambas emprendan sus respectivos caminos.
Este verano marca un punto de inflexión para la familia, siendo la última oportunidad en un tiempo para disfrutar juntos antes de que las responsabilidades reales y académicas reclamen de nuevo la atención de Leonor y Sofía.