Pedro García Aguado, conocido por su firmeza y determinación, sorprendió al público al proclamarse ganador de "Supervivientes 2024". Contra todas las expectativas, el exjugador de waterpolo y coach se llevó a casa el cheque de 200.000 euros, pero su visión del premio va más allá de lo personal. "Este dinero no es solo para mí, quiero devolverle a la sociedad todo el apoyo que me ha brindado", declaró con emoción al recibir el galardón.
Aunque la experiencia en Honduras ha catapultado aún más su popularidad, Pedro sigue fiel a su esencia. Tras su regreso, continúa dedicándose a su labor como coach y mentor, utilizando su presencia en televisión como una plataforma para inspirar y guiar a otros en su camino hacia la superación personal.
El desafío físico en la isla le llevó a perder 20 kilos, y ahora está concentrado en recuperar su forma física a través de entrenamientos funcionales intensivos. "Es momento de recuperar la fuerza y el músculo", comenta mientras se prepara para retomar su liderazgo en el Centro Tempus, la clínica que fundó para ayudar a personas en su lucha contra las adicciones.
Más allá de su éxito en el reality, Pedro es también un empresario con varias compañías y una fundación que reflejan su compromiso con la ayuda social. Aunque su patrimonio le permite vivir cómodamente, su verdadero propósito sigue siendo usar sus recursos y su experiencia para transformar vidas, un compromiso que sigue firme tras su paso por "Supervivientes". En el plano personal, Pedro García Aguado ha encontrado estabilidad y apoyo en su novia, Raquel Esteban, una terapeuta ocupacional con quien comparte su pasión por el bienestar y la ayuda a los demás. Raquel ha sido un pilar fundamental en su vida, brindándole apoyo tanto en su carrera como en sus proyectos sociales, formando una pareja que refleja un fuerte compromiso mutuo y una visión compartida de la vida.