El maquillaje "efecto buena cara" se ha convertido en una tendencia imprescindible para quienes buscan un look fresco y natural con el mínimo esfuerzo. Este estilo, que imita una piel luminosa y saludable, es perfecto para esos días en los que queremos vernos bien sin parecer que llevamos mucho maquillaje. ¿La mejor parte? Es sencillo de aplicar y se adapta a cualquier ocasión, incluso después de un día en la playa.
Preparación de la piel: La base del éxito
Antes de comenzar con el maquillaje, es fundamental preparar bien la piel, especialmente si has pasado tiempo al sol. Raquel Álvarez, maquilladora oficial de Chanel, recomienda optar por productos de skincare con texturas acuosas que hidraten en profundidad, evitando aquellos que contengan perfumes o alcohol. Esta preparación asegura que el maquillaje se asiente mejor y dure más tiempo.
El secreto está en la simplicidad
El maquillaje "efecto buena cara" no requiere de muchos productos, sino de los correctos. La clave está en utilizar solo lo necesario para resaltar la belleza natural del rostro. Raquel sugiere no aplicar la base de maquillaje en todo el rostro, sino solo en áreas donde sea realmente necesario, como pequeñas imperfecciones. Además, recomienda evitar las bases con acabado glow en verano, ya que pueden acentuar el brillo natural de la piel debido al calor.
Los básicos imprescindibles
Para lograr este look, solo necesitas cuatro productos esenciales:
Colorete: Añade un toque de color a las mejillas, dándote un aspecto saludable y vivaz.
Bronceador: Perfecto para realzar el bronceado natural y esculpir el rostro sutilmente.
Iluminador: Aporta luminosidad en los puntos clave del rostro, como los pómulos y el puente de la nariz.
Máscara de pestañas: Abre la mirada y completa el look con un toque de definición.