Los tipos de pareja han cambiado drásticamente en los últimos años. En lugar de adherirse a un modelo tradicional, hoy eligen sus propias normas y estructuras. A menudo, intentamos etiquetar nuestro vínculo para entender mejor nuestros sentimientos, pero la realidad es que lo esencial radica en las emociones compartidas. Así es como surge el concepto de “casi algo”.
Este vínculo no encaja en una etiqueta específica, pero está lleno de significado emocional. Los "casi algo" representan a personas que no formalizan como un noviazgo, pero en algunas ocasiones se vive con la intensidad y compromiso de una pareja estable. Estos lazos son complejos y profundos y a menudo resultan difíciles de superar cuando terminan; por ello, hoy exploraremos en qué consiste este fenómeno, cómo surge y por qué resulta tan complicado dejarlo atrás.
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En específico, los “casi algo” son dos personas que actúan como si estuvieran en una pareja formal, compartiendo sentimientos profundos y haciendo planes conjuntos, pero sin llegar a definir con un título oficial. Estos suelen estar marcados por una intensa idealización de la otra persona y del vínculo en sí. Cuando llegan a su fin, resulta especialmente difícil superarlas debido a la falta de concreción oficial, que intensifica la confusión emocional.
En esta línea, para sobrellevar el final de un “casi algo”, es crucial aceptar la ruptura y nombrarla como tal para facilitar el proceso de duelo. Reconoce y acepta tu tristeza, ya que es parte de la sanación. Apóyate en tus seres queridos, ya que estarás más consciente de tus necesidades sociales insatisfechas. Sé consciente de la idealización de esta pareja, recordando que la persona tiene defectos que no conociste bien. Aunque duela, con el tiempo el lamento disminuirá y te darás cuenta de que la situación no era tan perfecta como parecía.