Durante la primera hora de la mañana, recién despiertos, o en algún tiempo libre en la tarde, es ideal servirnos un café recién hecho y disfrutar de una de las bebidas más populares en todo el mundo. Pero después de preparar tu café, ¿qué haces con los residuos? Aquí te presentamos algunas opciones útiles y ecológicas.
En España se desechan más de 150 millones de kilos de residuos de café al año, una cantidad que podría tener múltiples usos beneficiosos. En lugar de tirar estos restos a la basura, puedes aprovecharlos de diversas maneras en tu vida diaria. Para muchas de estas aplicaciones, es importante dejar secar los residuos de café durante 24 horas antes de utilizarlos.
Uno de los usos más comunes de los residuos de café es como fertilizante para las plantas. Este "desperdicio" mejora el drenaje y la ventilación de la tierra, ayuda a retener el agua y proporciona nutrientes esenciales como nitrógeno y fósforo. Además, los granos de café molidos son excelentes para limpiar la vajilla. Son especialmente útiles para eliminar restos pegados en sartenes, bandejas y otros utensilios de cocina; solo necesitas un poco de estos residuos y una esponja para dejar todo limpio y reluciente.
Los malos olores ya no serán un problema gracias a estos restos. Coloca un poco de este material orgánico en la nevera, el cubo de basura o el armario, y despedirás los olores desagradables. Además, las brozas del café pueden eliminar el olor de ajo, cebolla o pescado en las manos. Frotar las manos con estos restos y enjuagar bien después eliminará el aroma indeseado, dejándolas frescas y sin olores persistentes. Aproveche los residuos de café porque ofrece soluciones prácticas y ecológicas para el hogar.
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