En el mundo de las dietas y de las rutinas “fit” existen muchas tendencias que van cambiando con el tiempo, aunque hay consejos básicos que se mantienen y siguen en vigencia. Por ello,, el equilibrio que se consigue adquiriendo hábitos saludables como sumar fruta y verdura a tus comidas vuelve a estar en el foco de atención de especialistas y aficionados.
Siempre se ha destacado la importancia de tener una dieta rica en fruta y verdura, legumbres y carnes y alimentos que ayudan a conseguir las vitaminas y minerales que nuestros organismo necesitan para subsistir. Pero muchas veces algunos consejos de influencers o personas poco profesionales hacen que la gente esquive comidas que son excelentes para su salud.
Esto sucede mucho con las frutas que son altas en azúcares saludables, que muchos malinterpretan como algo negativo para el organismo. Algunas de estas especies que mejoran la salud son la cereza, rica en potasio, fibra, ácido fólico, y con antioxidantes y antocianinas para las células; el kiwi, fuente de antioxidantes y vitaminas C y E o la naranja, que contiene en antioxidantes, antiinflamatorios, carotenoides y pectina.
A esta lista se le suman el mango, la manzana, la granada y el plátano, que tienen propiedades antioxidantes, potasio, magnesio, y, sobre todo, un gusto fantástico. Es indispensable para el funcionamiento correcto de nuestro organismo tener una dieta variada, en la que la fruta rica en vitaminas tenga un rol protagónico junto a verduras y demás grupos alimenticios.