Sin lugar a dudas, en el mercado coleccionista de monedas podemos hallar ejemplares de interés provenientes de todas partes del mundo. Con sus particularidades culturales e históricas, naciones de todas las latitudes han hecho sus aportes al campo numismático. En Europa, aunque suelen destacarse las piezas francesas y británicas, Noruega también tiene unidades atractivas. Por eso, a continuación, veremos una moneda que lo ejemplifica a la perfección.
La pieza de 10 coronas del año 1964 es una auténtica joya de colección, de esas con las que cualquier numismático quisiera contar. Con 34 milímetros de diámetro y un peso de 10 gramos, esta moneda de plata de los tiempos del rey Olaf V en Noruega cuenta con un diseño sencillo pero bonito, aunque, ante todo, destaca por su historia. ¿Queréis saber por qué? La respuesta está en su anverso.
El ejemplar en cuestión lleva la imagen del histórico edificio de Eidsvoll 1814, donde se redactó y se debatió la constitución de Noruega en el mencionado año. Actualmente, esta casa señorial ubicada en Akershus funciona como un museo dedicado, precisamente, a ese proceso constitucional. Sin embargo, lo cierto es que esta moneda simboliza buena parte de esa historia.
Por su valor simbólico, esta moneda de Noruega tiene también un considerable valor económico. En caso de contar con las certificaciones de autenticidad correspondientes y con un estado de conservación razonable, su precio de mercado oscila alrededor de los 500 euros aproximadamente, según indican los sitios especializados. ¿Os gustaría contar con ella en vuestra colección?
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