El Príncipe Harry se encuentra nuevamente en el centro de la controversia legal luego de que perdiera su intento de apelar la decisión del Tribunal Superior de Londres que lo dejó sin la protección de seguridad financiada por los contribuyentes en el Reino Unido.
Tras una batalla legal prolongada, el duque de Sussex, de 39 años, ha sido ordenado a pagar el 90% de los costos legales del Ministerio del Interior del Reino Unido por su intento de revertir el fallo inicial del tribunal. La decisión, tomada en febrero por el juez Sir Peter Lane, reafirmó que no hubo irregularidades en la decisión de privar a los Sussex de su seguridad en 2020. El tribunal consideró que la acción estaba justificada y no influenciada por falta de equidad.
Esta situación implica que tanto Harry como su esposa, Meghan Markle, ahora deberán cubrir personalmente los gastos de seguridad de su familia cuando visiten el Reino Unido, un golpe significativo para la pareja. El lunes, el juez Lane dictaminó que Harry debe asumir la mayor parte de los costos legales del Ministerio del Interior, aunque reconoció infracciones cometidas por el gobierno durante el proceso, lo que resultó en una reducción del 10% en los costos que el príncipe debe pagar. El equipo legal de Harry había solicitado una reducción aún mayor en los costos, pero el juez Lane desestimó esta petición, enfatizando que el demandante perdió integralmente el caso.
Esta última noticia legal representa un desafío adicional para el Príncipe Harry, quien ha estado enfrentando una serie de controversias y desafíos desde su salida de la familia real británica y su posterior mudanza a los Estados Unidos junto a Meghan y su hijo Archie.