El Palacio de Buckingham reveló hoy que el rey Carlos III ha sido diagnosticado con cáncer durante su tratamiento por agrandamiento de la próstata. Aunque el tipo no se ha especificado, el monarca de 75 años ha iniciado "tratamientos regulares" y se mantiene optimista. La noticia ha suscitado preocupación, pero el rey continuará con sus deberes constitucionales mientras recibe tratamiento.
El comunicado emitido por el Palacio de Buckingham ha expresado: "Durante el reciente procedimiento hospitalario, se observó otro tema de preocupación. Las pruebas de diagnóstico posteriores han identificado una forma de cáncer. Su Majestad ha comenzado hoy un programa de tratamientos regulares, tiempo durante el cual los médicos le han aconsejado que posponga sus tareas de cara al público".
"Durante todo este período, Su Majestad continuará realizando los asuntos de Estado y trámites oficiales con normalidad. El Rey agradece a su equipo médico la rápida intervención, que fue posible gracias a su reciente procedimiento hospitalario. Sigue siendo totalmente positivo acerca del trato recibido y espera volver a desempeñar plenamente sus funciones públicas lo antes posible", ha añadido sobre Carlos III.
Así mismo, han aclarado que el rey Carlos III decidió compartir el diagnóstico para evitar especulaciones y con la esperanza de poder ayudar a todos aquellos que se ven afectados en el mundo por la misma afección.
¿Qué sucede si la salud de Carlos III empeora?
En caso de que la salud del rey Carlos III empeore, el príncipe Guillermo de Gales, de 40 años, sería el próximo en la línea de sucesión al trono británico. Su esposa, Kate Middleton, ahora conocida como Catalina de Gales, asumiría el papel de reina consorte. La situación plantea preguntas sobre el futuro de la monarquía y cómo afectaría a los miembros de la familia real británica.
Además, la operación 'Menai Bridge', el plan para el funeral del rey Carlos III, ya está en las primeras etapas de planificación. Simon Morgan, exoficial de protección real, señaló que el proceso sería similar al 'London Bridge' que siguió al perecimiento de la reina Isabel II. La sucesión al trono involucraría el ascenso de Guillermo como soberano y cambios en la línea de sucesión de la familia real.
El príncipe Guillermo, al convertirse en rey, podría elegir un nuevo nombre. Mientras tanto, Kate Middleton asumiría el papel de reina consorte, y hay especulaciones sobre si adoptará el nombre de Reina Catherine. La línea de sucesión cambiará, afectando a miembros como el príncipe George y la princesa Charlotte. Camilla Parker, actual reina consorte, enfrentaría cambios en sus títulos y roles si sobrevive al rey Carlos III.