La atención de la prensa internacional se ha vuelto a centrar en la vida matrimonial de los reyes Letizia y Felipe VI, con un detalle que ha desatado especulaciones. La ausencia del anillo de compromiso en el anular de la soberana es señalada por numerosos medios extranjeros como un posible indicio de problemas en la pareja, en pleno revuelo por los rumores de infidelidad develados por su excuñado, Jaime del Burgo.
Desde su compromiso en 2003 y su matrimonio al año siguiente, Letizia rara vez ha sido vista luciendo su anillo de compromiso en público, según destacan los medios internacionales. En su lugar, opta por una joya chapada en oro de Karen Hallam, lo que ha avivado las conjeturas sobre las razones detrás de esta elección y alimentado las especulaciones sobre la estabilidad de su vínculo con Felipe.
Aunque la reina presumió su anillo durante los primeros años de matrimonio con Felipe, su repentina desaparición dejó espacio para todo tipo de rumores. A pesar de las insinuaciones de crisis, Letizia ha aclarado en varias ocasiones que la joya original es incómoda, ofreciendo una explicación aparentemente lógica a su discurso. Sin embargo, hay un trasfondo más intrigante detrás de la historia del anillo.
¿Por qué Letizia no lleva su anillo de compromiso con Felipe?
Según afirmaciones de periodistas como Esteban Urreiztieta y Eduardo Inda en su libro 'Urdangarin, un conseguidor en la corte de Juan Carlos', el anillo de compromiso fue adquirido por Iñaki Urdangarin, excuñado de Felipe. Este hecho, sumado a la historia de cómo fue adquirida la joya, con la intervención del ex Duque de Palma y su posterior implicación en escándalos financieros, ha llevado a especulaciones sobre la negativa de Letizia a llevarlo y ha agregado una capa adicional de intriga a la situación matrimonial de los reyes.