Las zanahorias son uno de los vegetales más nutritivos que podemos encontrar en la verdulería. Es una planta fácil de cultivar en casa, incluso si hay poco espacio para que se desarrollen. Plantarlas es una actividad ideal, tanto para principiantes que están buscando ingresar al mundo de la jardinería, como para aquellos que buscan ahorrar en las compras. Aquí les ofrecemos una guía práctica para que puedan cultivar zanahorias en su propio hogar.
Además de ser una planta que nos puede dar muchos beneficios, es una actividad que se puede realizar con los más pequeños, ya que los mantendrá entretenidos y conectarán con la naturaleza. Lo primero que hay que saber es que las zanahorias necesitan luz solar de manera directa, por lo que se necesitará un espacio con al menos 6 horas de sol al día. Se pueden cultivar en un huerto vertical. Si se van a plantar en macetas, tienen que tener como mínimo 30 cm de profundidad para que las raíces puedan desarrollarse correctamente.
La siembra de la zanahorias debe hacerse directamente en el suelo, ya que no les gusta que se trasplanten. Hay que sembrar las semillas a una profundidad de aproximadamente 1 cm y separadas entre sí. Esta planta necesita de un riego constante, pero sin excederse, ya que se pueden pudrir las raíces. Una vez que comienza a crecer, hay que quitar la hierba que pueda afectar a los nutrientes, y es clave mantener el suelo fertilizado para que se desarrolle como es debido.
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Las zanahorias están listas para cosechar entre 2 a 4 meses después de la siembra, dependiendo de la variedad que hayan utilizado. Cuando la parte superior de la raíz asome ligeramente por encima del suelo y se vean de un buen tamaño, puedes empezar a sacar las zanahorias con cuidado. Usa una pala para cosecharla y disfrutar de esta planta que se ha convertido en una deliciosa verdura.