Tras conocerse la noticia de que Marta Riesco estaría cubriendo los premios PR en representación de su actual programa, "Ni que fuéramos Shhh", fuentes aseguran que Ana Rosa Quintana, la presentadora de Telecinco, habría intervenido para impedir su presencia en el evento.
Marta Riesco, que ya contaba con la acreditación correspondiente para asistir a la gala, ha sido invitada a abandonar el Palacio de la Prensa de Madrid. Según ha relatado la propia periodista en directo a su compañera María Patiño, el responsable de los premios le comunicó de manera tajante que no era bienvenida y que, a pesar de tener la acreditación en su poder, se le impedía el acceso.
"El responsable de estos premios me ha dicho que abandone directamente el Palacio de la Prensa, tanto a mí como a mi compañero. Le hemos preguntado por qué y nos ha dicho que no estamos invitados, que no somos bienvenidos aquí y que él decide qué medios vienen y qué medios no", relataba Marta Riesco, visiblemente afectada.
Luego, ha contado que a la persona en cuestión le remarcó que tanto ella como su compañero estaban acreditados para el evento, e incluso le enseñaron la acreditación, pero el susodicho no dio el brazo a torcer. "Me ha dicho que le da igual. 'Soy yo el dueño, yo decido quién viene y vosotros no vais a ser personas presentes en estos premios'", ha comentado Marta Riesco, enfadada.
La reacción en las redes sociales
Esta nueva polémica se suma a la larga lista de enfrentamientos entre ambas periodistas. Desde la salida de de Telecinco y su incorporación a "Ni que fuéramos Shhh", las tensiones entre ambas han sido constantes, con acusaciones cruzadas y enfrentamientos públicos.
La decisión de vetar a Marta Riesco ha generado un gran revuelo en las redes sociales. Mientras algunos usuarios han mostrado su apoyo a la periodista, otros han justificado la decisión de Ana Rosa Quintana, argumentando que tiene derecho a decidir quién asiste a un evento organizado por ella.
"No me extraña, grande AR", "Que ascazo!!!!", "¿Y cómo sabe ella quién la vetó?", "Qué ganas de que Ana Rosa se jubile y se vaya a su casa", "Vergüenza le tendria que dAR", "Ana Rosa se cabrea. Está cabreadísima con el fracaso de su TardeAR", "Lo que les jode es que Marta como reportera es un 10 y sabe que se come a todos", fueron algunos de los comentarios que se pudieron leer.
Este nuevo capítulo en la rivalidad entre ambas periodistas plantea interrogantes sobre la libertad de prensa y el derecho a la información. ¿Hasta qué punto una persona con influencia en el medio puede condicionar la presencia de otros periodistas en un evento público? ¿Es lícito vetar a un profesional de la comunicación por motivos personales?