El celular se ha convertido en un amigo inseparable, en un compañero que siempre está a nuestro lado para salvarnos de cualquier situación. Sin embargo, hay momentos en los que puede llegar a convertirse en un enemigo si no se toman las precauciones adecuadas recomendadas por los expertos.
Lo cierto es que uno puede quedarse hasta altas horas de la madrugada con el celular en la mano, sin hacer nada en específico. Sin embargo, al darse cuenta de lo tarde que es, muchas personas tienden a bloquearlo y guardarlo bajo la almohada en un intento por conciliar el sueño, pero esa es la peor decisión que se puede tomar.
Un estudio realizado por especialistas en endocrinología de la Universidad de Buenos Aires afirma que las luces emitidas por las pantallas de los celulares pueden afectar el funcionamiento de la hormona melatonina, que es la encargada de regular el ciclo del sueño.
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Además de causar problemas para conciliar el sueño, hay otra problemática al guardar el celular debajo de la almohada. Muchas veces, uno lo conecta al cargador y lo deja reposando sobre el colchón. Esto es peligroso debido a las posibilidades de que el enchufe sufra algún desperfecto y genere un cortocircuito. Por eso, los especialistas afirman que lo más recomendable es que el celular esté, al menos, a 5 metros de distancia.