La partida de Maica hacia el intercambio de Gran Hermano Italia ha generado gran preocupación en la casa de Guadalix, especialmente en Adrián. A pesar de que la concursante murciana le ha dejado claro en múltiples ocasiones que entre ellos solo existe una amistad, Adrián no puede evitar sentir algo más.
Esta tensión quedó patente en su emotiva despedida antes de que Maica se marchara a Italia. Sin embargo, la preocupación de Adrián no solo reside en los sentimientos que alberga, sino también en la llegada de los concursantes italianos Lorenzo y Shaila, quienes aterrizaron en la casa española en medio de gran expectativa.
Adrián ha confesado en varias ocasiones que teme que Maica pueda sentir algo por Tomasso, uno de los participantes de Grande Fratello. Las primeras horas de Maica en la casa italiana han sido todo un revuelo, y según algunas fuentes, Tomasso parece haber pasado el "test del cucaracho", un curioso término que Maica ha mencionado para describir a quienes cumplen con ciertos estándares antes de iniciar una relación. Mientras tanto, en Guadalix, Adrián sigue con los nervios a flor de piel, a la espera del regreso de Maica.
La llegada de Lorenzo y Shaila tampoco ha ayudado a calmar las aguas en la casa española. Los colaboradores del programa aseguran que estos dos concursantes italianos prometen avivar la convivencia y generar nuevas alianzas o conflictos, lo que podría aumentar aún más la presión sobre Adrián.