Armar el arbolito de Navidad se convierte en uno de los momentos más especiales de la temporada navideña. Ya sea por amor a la decoración o como una tradición familiar, el 8 de diciembre marca el inicio de un periodo mágico. Sin embargo, con el Día de los Reyes Magos llega el momento de despedirse de las festividades y desarmar el arbolito. Según la tradición, el 6 de enero es el día indicado para este ritual, pero el Feng Shui nos ofrece un consejo diferente. De acuerdo con esta antigua filosofía china, desarmar el árbol de Navidad el 7 de enero es más propicio. Este pequeño ajuste temporal busca aprovechar las energías positivas de la celebración de los Reyes Magos antes de dar paso al desmontaje del símbolo festivo.
No se trata solo de un cambio en la fecha, sino de abordar el desarme con una conciencia renovada. El Feng Shui sugiere que el proceso no debe ser apresurado ni mecánico; más bien, es un momento para reflexionar. A medida que retiramos cada adorno, se nos insta a reflexionar sobre los aspectos de nuestra vida que deseamos dejar atrás en el año que comienza. Es un ejercicio de autoevaluación que nos permite identificar y liberar energías no deseadas.
Además, el Feng Shui destaca la importancia de realizar el desarme de manera consciente, lejos de la prisa y el automatismo. Cada adorno debe ser retirado con cuidado y respeto, enfocándonos en la energía que representan. Este proceso no solo implica despedirse de la temporada festiva, sino también de cualquier carga emocional o negatividad acumulada durante el año.
Como complemento, el Feng Shui sugiere la posibilidad de llevar a cabo un ritual de limpieza para liberar cualquier energía negativa que pueda haberse acumulado en los adornos. Este acto simbólico no solo contribuye a mantener la armonía en el hogar, sino que también prepara el espacio para nuevas experiencias y oportunidades en el año que comienza.
Desarmar el árbol de Navidad con la guía del Feng Shui se convierte así en un ritual que va más allá de simplemente guardar las decoraciones. Es una oportunidad para renovar energías, reflexionar sobre el pasado y prepararse para un nuevo año lleno de posibilidades.