La celebración de Reyes Magos, que tiene lugar el 6 de enero, tiene profundas raíces históricas y religiosas. Esta tradición conmemora la llegada de los Reyes Magos a Belén, según el relato bíblico.
Según la Biblia, Melchor, Gaspar y Baltasar siguieron una estrella para llegar al lugar de nacimiento de Jesús, llevando consigo regalos de oro, incienso y mirra. Esta historia se ha transmitido a lo largo de los siglos y se ha convertido en una parte fundamental de la Navidad en muchas culturas.
El día de Reyes, también conocido como la Epifanía, marca el final de la temporada navideña en varias culturas cristianas. La palabra "epifanía" significa manifestación y se refiere al momento en que Jesús fue develado al mundo a través de la visita de los Reyes Magos. La fecha también simboliza la adoración y reconocimiento de Jesús como el Hijo de Dios por parte de los magos, representando la universalidad de la salvación.
A lo largo de los siglos, la celebración de Reyes Magos ha adquirido diversas tradiciones y costumbres en diferentes regiones del mundo. En muchos lugares, la víspera del 6 de enero es una ocasión para celebrar con desfiles, eventos comunitarios y representaciones teatrales que recrean la historia de los Reyes Magos. Además, la costumbre de intercambiar regalos en este día refleja el gesto de los magos al presentar obsequios a Jesús. La tradición ha evolucionado con el tiempo, pero su esencia sigue siendo un recordatorio de la importancia del acto de dar y celebrar la llegada de la luz al mundo.