Por la extensa y sorprendente historia que tiene su realeza, el Reino Unido es uno de los países que más ejemplares le ha aportado al mundo de la numismática. En ese sentido, a continuación, veremos una antigua moneda que es el perfecto ejemplo de ello y que, por diversas razones, continúa sorprendiendo a los coleccionistas en la actualidad.
La moneda de 1 centavo del año 1797 es, sin lugar a dudas, una joya del coleccionismo. Fue fabricada en cobre, cuenta con un diseño sencillo pero bonito y, por su antigüedad de más de 2 siglos, es realmente difícil de conseguir en la actualidad. Además, destaca por su valor histórico. ¿Por qué?
Esta moneda lleva la imagen del Jorge III, rey de Gran Bretaña y de Irlanda desde 1760 hasta el 1801, y rey del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda desde entonces hasta el 1820. Por eso, si halláis una de estas piezas en las condiciones idóneas de conservación y certificación, puede costar entre 1100 y 1700 euros según los sitios especializados.
Como podemos ver, esta moneda del Reino Unido es una de esas piezas que todos los numismáticos quisieran tener en su colección. Se trata de un ejemplar antiguo, bonito en su diseño y con valor histórico… todo lo que hace falta para tener un valor de mercado más que considerable.
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