Felipe VI, el rey de España, es conocido por sus diversas aficiones que abarcan desde el amor por los animales hasta la pasión por la tecnología. Su profundo amor por los perros, en especial "Pinqui", "Balú" (regalo de los reyes de Bélgica en 1983), y "Pushkin", revela su conexión con los animales. Incluso ha participado en la creación del documental La España salvaje, transmitido por TVE, mostrando su interés por la naturaleza.
Felipe VI también tiene una fascinación por los coches desde joven. Su padre le obsequió un Seat Ibiza preparado para rallies cuando cumplió 18 años, alimentando su amor por la velocidad y los vehículos deportivos. Además, su gusto musical abarca desde compositores clásicos como Bach hasta artistas de pop moderno como Pink Floyd, Van Morrison, Springsteen y Alejandro Sanz.
Felipe VI es un apasionado deportista, siendo el esquí y la vela dos de sus actividades favoritas, heredadas del gusto de su padre. Aunque la caza fue una de sus aficiones juveniles, gradualmente la fue abandonando. También es conocido por su amor al squash. En cuanto al fútbol, el rey es un declarado seguidor del Atlético de Madrid, confesando su lealtad a este equipo.
Además de sus intereses deportivos y musicales, Felipe VI enseña un entusiasmo por la tecnología. Siempre está dispuesto a probar nuevos gadgets y asistir a eventos tecnológicos para conocer las últimas novedades. Finalmente, la cocina también es parte de las aficiones de Felipe VI, ya que desarrolló su interés por la culinaria durante su tiempo en la Universidad de Georgetown, donde concluyó con honores su máster en Relaciones Internacionales a la edad de 27 años, junto a su primo Pablo de Grecia.