En España, la afición por coleccionar monedas antiguas está en auge, ya sea por su valor histórico y cultural o por su potencial económico. Las pesetas y otras piezas del pasado ahora tienen un elevado precio en euros, y aquí te compartimos tres sencillos pasos para sacarles el máximo beneficio.
Primero, identifica las piezas valiosas y dirígete a los lugares adecuados para venderlas. Según el experto numismático Javier Mercado, "el mercado de los coleccionistas ha evidenciado que algunos ejemplares pueden guardar una fortuna que supera exponencialmente su valor real". El precio depende de factores como la tirada, los errores de acuñación y la conservación de la moneda.
La calidad de conservación es esencial; cualquier defecto importante puede reducir significativamente el valor de una moneda. El especialista señala que "defectos tales como agujeros, restos de soldaduras, oxidaciones y otros daños importantes hacen que la moneda pierda casi todo su valor".
Además, el valor de una moneda varía según el vendedor. Es importante obtener una valoración profesional de una casa de subastas numismáticas, que te asesorará sobre las piezas más valiosas y el proceso de venta. Las opciones en línea están en auge, con un crecimiento constante en popularidad. Asegúrate de contactar a varias empresas, negociar los términos y condiciones, y enviar tus ejemplares para su evaluación y posterior subasta. ¡Podrías tener un tesoro en tu casa! Las unidades de 5 pesetas de 1949 pueden alcanzar los 20.000 euros, mientras que algunas de 100 pesetas llegan a los 150.000 euros.