Uno de los detalles más llamativos del mundillo de la numismática es que una moneda no necesita ser antigua para ser costosa. Algunas piezas fueron acuñadas en cantidades bajas, y, además, ciertos ejemplares se fabricaron con errores. Así, han aparecido unidades como la que veremos a continuación, que no dejan de sorprender a los coleccionistas.
La moneda italiana de 1 euro, del año 2002, que lleva en su diseño el dibujo del ‘Hombre de Vitruvio’ de Leonardo Da Vinci, es una pieza muy buscada en el coleccionismo. Al no ser tan antigua ni tan escasa, en condiciones normales, no es precisamente costosa. Pero existen algunas con un error muy particular que hace crecer su valor de mercado.
En algunas tiradas, esta pieza ha traído un error en el rostro del histórico dibujo que enseña las proporciones del cuerpo humano, una pequeña deformación, que ha llamado la atención de los especialistas. De esta manera, si os topáis con un ejemplar que cumpla con esta condición, podría costar hasta 1000 euros. ¡Nada mal para una moneda moderna!
Como podemos ver, la moneda italiana en homenaje a Da Vinci es un ejemplo de ese tipo de piezas que, en el mundillo de la numismática, no dejan de sorprender. Un ejemplar que no es tan difícil de conseguir y que, en caso de poder venderlo, podría proporcionarnos una pequeña fortuna.
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