Como ha sucedido en reiteradas oportunidades, el deceso temprano de celebridades reconocidas entre sus pares por su talento y su cordialidad genera enormes impactos a nivel global. En este caso, quien ha dejado este mundo en las últimas horas es Kevin Turen, un productor cinematográfico de origen neoyorquino que ha sido parte de varios de los proyectos más importantes de esta industria durante los últimos años.
Educado en la Universidad de Columbia, activo como productor desde el año 2005, casado y con dos niños, Turen ha perdido la vida el pasado domingo 12 de noviembre. Aún se conoce muy poco sobre las circunstancias de su partida, confirmada oficialmente por su familia, pero lo que sí es claro es que ha generado un enorme dolor en el mundillo de las producciones audiovisuales.
Recientemente, el estadounidense había participado en las producciones de ‘The Idol’ y ‘Euphoria’, dos de las series de HBO que más han dado que hablar en el último tiempo. Además, ya había participado previamente en películas como ‘An American Crime’, del año 2007, o ‘Las novias de mis amigos’, estrenada en 2014. De esa manera, era apuntado por los especialistas como uno de los talentos emergentes más prometedores de la industria.
En ese sentido, al despedirse de Kevin Turen, Jay Penske se refirió al neoyorquino como “una de las estrellas en ascenso más brillantes de Los Ángeles”. El productor se ha ido de forma inesperada, sembrando el dolor en el mundo del cine, pero dejando un legado que quedará para la posteridad.
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