El avance del tiempo deja hace que algunas zonas de nuestro organismo se vean afectadas a causa de los signos de la edad. Una de ellas sin las articulaciones que comienzan a perder colágeno y adoptan una textura rígida que hacen que las extremidades comiencen a ponerse más rígidas. No obstante, existen una serie de trucos fáciles para el cuidado del cuerpo para que puedas realizar desde la comodidad de tu casa y así favorecer la flexibilidad a partir de los 50 años.
En este contexto, la especialista Cristina Fernández le confesó a la ´Revista Semana´: "A partir de los 50 años, nuestros músculos y tendones tienden a acortarse y a perder elasticidad, lo que pueden afectar nuestra movilidad y resistencia, pero la actividad física y la flexibilidad pueden contrarrestar estos efectos". Por tal motivo, se le debe prestar una mayor atención al cuidado del cuerpo. Además, la experta en rutinas fitness sostuvo: "Estos ejercicios pueden ayudar a aliviar la rigidez que se acumula con el sedentarismo o después de un largo día. Además, es recomendado incluir sesiones independientes 2-3 veces por semana para realizar una rutina completa de ejercicios de estiramientos que abarque todas las principales áreas del cuerpo".
Os puede interesar: "Cómo mantener una postura saludable en el trabajo"
De esta manera, la profesional en materia de salud destacó algunos beneficios de adquirir una conducta física en pleno movimiento para barrer con las consecuencias del sedentarismo. Uno de los factores más que positivos para el cuidado del cuerpo es que la movilidad aporta autonomía en nuestros músculos y articulaciones, lo que permite realizar acciones cotidianas tales como atarse los zapatos o tomar cosas de la alacena. Asimismo, se pueden prevenir lesiones corporales dado que la actividad física contrarresta la rigidez.
El momento del día ideal para poner en marcha el cuidado del cuerpo
Si bien los especialistas no tienen delimitado un horario en específico para el cuidado del cuerpo, lo cierto es que depende de los tiempos que tengáis para dedicarle al menos diez minutos al día. Puede ser por la mañana ni bien te despiertas, estirando los brazos y piernas para aliviar la rigurosidad que mantiene el organismo cuando dormimos y así favorecer la circulación sanguínea. Pero, si tienes un trabajo que implica estar mucho tiempo sentado frente a un ordenador, lo ideal sería que tomes pausas cortas para desperezarte, ponerte en movimiento y relajar las articulaciones con una breve caminata por la oficina o el lugar en donde estés. Finalmente, es aconsejable realizar estos cinco ejercicios de manera rutinaria, tales como el yoga, pilates, tai chi y estiramientos estáticos y dinámicos.