Todas las expectativas están puestas en la recuperación de José Fernando, el hermano de Gloria Camila e hijo de José Ortega Cano, tras llevar más de cinco años internado en una clínica de rehabilitación por adquirir conductas que atentaban contra su salud. Pero ya todo está quedando en el olvido y los tormentos que algún día se apoderaron del clan del diestro, ya solo queda en un mal recuerdo. Las salidas transitorias que obtuvo durante las fiestas acrecentaron más la idea de que el muchacho pronto estará de regreso en su hogar junto a su pequeña heredera y su fiel compañera, Michu.
"José Fernando es un chico muy agradable, no se mete en líos y se lleva bien con todo el mundo. Ha mejorado notablemente y ya está listo para iniciar una nueva vida", aseguró una fuente solvente del centro de psiquiatría San Juan de Dios, de la localidad Ciempozuelos. De esta manera, José Fernando pudo encontrar la contención que le faltó al comienzo no sólo por parte de su círculo familiar sino con el que él mismo pudo conformar: una familia de tres en la que fruto de ese romance nació María del Rocío.
Al parecer, José Fernando planea regresar a su vida normal con magnos proyectos que involucra el plano laboral como así también el personal. En este sentido, según confirmaron personas cercanas al primogénito del torero, planea llegar al altar de la mano de Michu, lo que representaría una verdadera historia de romance en la que la salud y la enfermedad fueron los principales protagonistas.
Todo estaría pensado para finales de año, tiempo suficiente para organizar detalle por detalle lo que será un día de ensueños para José Fernando. No obstante, se espera que, a principios de este verano, el hijo adoptivo de Rocío Jurado pueda abandonar definitivamente el nosocomio de desintoxicación para comenzar una nueva etapa completamente purificado, aunque tendrá que aprender a vivir con la contaminación que le producen los enfrentamientos mediáticos a su padre y los agravios que recibe su hermana en redes sociales.