Hasta hace muy poco, encontrar un tinte vegetal al 100% que cubriera las canas era prácticamente imposible. Atrás quedaron los años 90, cuando encontrar una mujer sin teñir era difícil, las canas eran tabú y los colores estrambóticos los más elegidos. Hoy en día, hemos avanzado enormemente en el cuidado del cabello, especialmente en lo que respecta a los tintes, conocidos por deteriorar tanto el pelo como el cuero cabelludo.
La henna es el tinte vegetal al 100% más conocido, pero ahora hay una opción aún más versátil: los tintes cultivators. Aunque a menudo se les llama henna, la henna es solo una de las muchas plantas en la mezcla. La henna da el color más rojo, pero otras plantas en la composición proporcionan una gama de tonos, desde rubios y castaños hasta morenos y negros. Plantas como cúrcuma, casia, camomila y amla no solo trabajan en la coloración del cabello, sino que también le proporcionan brillo y fuerza a cabellos debilitados.
Antes de aplicar el tinte ecológico, es fundamental lavar el pelo con un champú orgánico para eliminar ingredientes tóxicos como siliconas y parafinas que plastifican el cabello. Esto permite a las plantas del tinte vegetal penetrar en la cutícula, ayudando tanto a la coloración como a la nutrición del cabello. Estos tintes no solo cubren las canas, sino que también pueden aclarar ligeramente el cabello y se fijan mejor en cabellos no tratados previamente con productos químicos.
Además de estos beneficios, los tintes vegetales mantienen el cabello fortalecido y el cuero cabelludo saludable, sin escamas ni resequedad. Nos ahorran la exposición a los tóxicos presentes en los tintes convencionales. Si aún no lo has utilizado, es el momento de hacerlo y lograr un cabello sano y hermoso sin comprometer tu salud.