Anitta ha emergido como una de las cantantes más destacadas a nivel mundial en los últimos años. A pesar de haber alcanzado la fama y liderar las listas de éxitos internacionales, la artista carioca sigue siendo leal a su estilo y a su país de origen. En cada melodía que compone, Anitta deja en claro sus raíces, y a través de su música influenciada por el ambiente de las favelas, ha logrado hacer bailar incluso a políticos con su exitoso tema 'Envolver'. Sin embargo, el camino hacia el éxito no fue sencillo para la cantante, que creció en las favelas de Brasil. A pesar de sus inicios difíciles, Anitta, ahora empresaria y modelo, se vincula con reconocidos artistas como Maluma y tuvo un romance con el modelo Simone Sussina. No obstante, la cantante no siempre lució de la misma manera.
Infancia
Larissa de Macedo Machado, más conocida como Anitta, nació en 1993 en Río de Janeiro, Brasil, y siempre supo que estaba destinada al éxito pues desde pequeña le gustaba cantan, bailar y quería dedicarse al 100% a ser artista.
Adolescencia
Antes de convertirse en una artista popular, Anitta lucía muy diferente. Cuando empezó a ganar dinero invirtió en cirugías para lograr la imagen que soñaba y al parecer lo logró, según confesó en una reciente entrevista la cantante.
Primeros cambios
"Yo me hice muchas cirugías plásticas, toda mi cara es de mentira", confesaba en una entrevista la intérprete. Además declaró que antes de podes costear sus cirugías plásticas ella le realizaba retoques fotográficos a sus fotos, pues lo primero que le incomodaba era su nariz.
Nuevo estilo
La artista no tiene problema alguno en desvelar las cirugías estéticas que se realizó, es más ha confesado que lleva casi 10 en total. Anitta confesó haberse retocado la nariz, el mentón y aumentado alguna parte más de su cuerpo. Lejos de no sentirse cómoda con su aspecto, la colega de Maluma confiesa que los cambios estéticos son como cambios de look: "No tiene nada que ver con que yo no sea feliz conmigo misma. Para mí, es como cambiar mi pelo", declaró.