Aunque pareciera que siempre ha estado ahí y ha permanecido inmaculada a lo largo de los años, lo cierto es que la Navidad ha ido mutando de manera muy marcada. Por eso, hoy vamos a hablar de tres tradiciones que ya no existen pero que pueden ser incorporadas nuevamente, mas no sea por aplicar un toque diferente a la Navidad.
El primer paso
Allá lejos y hace mucho tiempo, se creía que había una manera de garantizar que los anhelos de todos para el año venidero se cumplieran y que esta se encontraba en la Navidad. “El primer paso” consistía en que un hombre de cabello oscuro debía ser el primero en cruzar el portal de la casa y debería llevar consigo una bolsa con tres objetos que representaran lo que se quería para ese hogar en los próximos meses. Por ejemplo, si quería todos tuviesen prosperidad financiera, entonces debería llevar una moneda.
El duodécimo pastel
Las tradiciones navideñas que incluyen comida siempre son bienvenidas. El duodécimo pastel era una fija en cada mesa hasta finales del siglo XIX. En él se ocultaban un frijol y un guisante seco de cada lado. Luego cada persona tomaba un trozo y quienes se toparan con los añadidos se transformaban en la pareja que iniciaría el baile de la noche. Se podría decir que se trataba de una especie de primo del querido roscón o rosca de reyes.
Santa de verde
Aunque hoy en día es normal que veamos a Santa Claus (San Nicolás o Papá Noel) con su tradicional traje rojo, lo cierto es que no siempre fue así. Antes su traje era verde, por lo que quizás se podría retomar esa versión original. No solo se despertaría alguna risa, sino que además serviría para retomar otra tradición de Navidad completamente olvidada: la de contar historias fantásticas en la mesa.