"Vengo de una familia bien. Lo siento, eso se hace, no se nace", decía Enrique Bofill al presentarse en First Dates Hotel. Al igual que ocurriría semanas después en su participación en La Sexta, decía que era enfermero, aunque agregaba la muletilla de "capilar" para dar más detalles sobre su profesión.
Lejos del tono crítico y la situación económica precaria que decía tener en la Sexta, Quique, como se hacía llamar en el programa, apuntaba alto. "Quiero gente de nivel. Que antes de enseñarme sus abdominales me enseñe su cuenta corriente", decía mientras se sometía a manicura y se permitía bromear con Carlos Sobera.
Su cita fue Álex, de 51 años. Enrique Bofill aseguró que de inmediato sintió que había algo especial entre ellos. "No sé qué ha pasado entre nosotros que hemos brindado desde el minuto uno... algo había en la atmósfera", afirmaba al comienzo de un encuentro que seguiría un rumbo cómplice y romántico en toda su duración.
Al finalizar la cita, Alex le regalaba una rosa a Enrique Bofill. El actor afirmaba que era la primera vez en once años que alguien le obsequiaba algo así e incluso se atrevía a hablar de planes a futuro entre ambos, dejando la mesa servida para darle una oportunidad al amor.