Tras algunas semanas en las que los conflictos familiares estuvieron a la orden del día, Fran Rivera decidió alejarse de todos ellos y comenzar un nuevo e inesperado proyecto, que poco tiene que ver con su carrera. Por fortuna para él, este primer paso tan importante contó con la mejor compañía posible: Tana Rivera, su hija.
Fran Rivera se estrenó como guitarrista y cantante con su grupo de rumba: "Una y nos Vamos". Él mismo lo anunció a través de su cuenta de Instagram, con una publicación en la que se lo puede ver junto al resto de los integrantes. "Aquí estamos. Un grupo de amigos sin pretensiones, que buscamos estar juntos con nuestras guitarritas y nuestro compás. Una y nos vamos", escribió.
Aunque lógicamente no pudo evitar los nervios al presentarse con en su nueva faceta, la presencia de Tana fue la que lo hizo seguir adelante. Su hija estuvo en primera fila y apenas sintió los acordes de la guitarra se puso a bailar y a alentarlo, como si fuese una de sus seguidoras, haciendo que se sintiera respaldado por completo.
De esta forma, Fran Rivera comenzó una nueva etapa en su vida, rodeado de la mejor compañía que pudiera tener. Aunque él mismo afirma que no tiene "pretensiones" con su nueva banda más que pasar el tiempo junto a sus amigos, es evidente la ilusión que le genera poder hacerlo.