Cada día sorprenden más las actitudes que Ana María Aldón y José Ortega Cano imparten para sí mismos. El matrimonio pende de un hilo hace meses y ya se ha vuelto rutinario el hecho de que la diseñadora sea vista lejos del diestro. Si bien no han confirmado el divorcio, la colaboradora reaccionó de una manera extraña al ser notificada que el diestro había ingresado al hospital.
Tras el encontronazo en el plató de ‘Ya es verano’ el pasado domingo, Aldón y Ortega Cano lograron confluir en dos oportunidades en el hogar del diestro. La semana pasada, desde Ibero Show, te presentamos el primer día de clases de José María y, al salir para el instituto, la diseñadora y el extorero descorrieron la puerta de salida en conjunto, algo que dejó perpleja a toda la prensa.
Si bien el matrimonio había aclarado que seguiría unido por su niño, las últimas reacciones de Aldón acerca del estado de salud de Ortega Cano han dado de qué hablar. Ante la consulta de la reportera de por qué el diestro estaba en el hospital, la diseñadora aseveró: “Está bien. Es un control rutinario”. De esa manera, la colaboradora despejó cualquier tipo de dudas al respecto de una posible enfermedad.
“Yo lo he llevado muchas veces. No le llevo [al hospital] porque no le hace falta que le lleve. Cuando haga falta, le llevaré. Estaré ahí”, zanjó Ana María Aldón al ingresar a su auto. Con una sonrisa y con sus gafas de sol puestas, la diseñadora aclaró que todo se trataba de algo cotidiano. En tanto, la revista Lecturas afirmó que José Ortega Cano ha sido acompañado al centro médico por su cuñado, Aniceto.