El pasado 31 de julio, Violeta Mangriñán dio a luz a Gala. La influencer y su novio, Fabio Colloricchio, la esperaban con muchas ansias. Fue un parto que se extendió por mucho tiempo; la bebé nació luego de 40 semanas. Como suele hacer con cada momento especial de su vida, ella ha ido compartiendo cómo han sido los primeros días de su niña en familia. Pero también ha develado que tuvo un contratiempo de salud.
Violeta tuvo que regresar al hospital tras haber dado a luz y se encendieron las alarmas. En su cuenta de Instagram, la influencer anunció que comenzó a sentirse mal y decidió atenderse. "Llevo todo el día con dolor de cabeza y dolor muy fuert* de riñon*s”, contó. La joven dijo que se hizo un test del virus para prevenir y, afortunadamente, dio negativo. Luego, acudió a emergencias para saber qué ocurría.
Violera era consciente que podía sentirse mal tras el parto, pero esos dolores la preocupaban. “Cada día me duele más en vez de menos", confesó. Tras atenderse, la joven contó el diagnóstico a sus seguidores: "Pues sí, tengo infecci*n de orin*". La verdad es que, si bien está feliz con la llegada de su hija, está bastante incómoda con su salud. Lo que más ha estado padeciendo es el no dormir bien y agregó: “ahora antibióticos… que me dejan hecha una porquerí*”.
A pesar de sentirse mal, Violeta Mangriñán está en el mejor momento de su vida. Este jueves, la influencer ha compartido algunas imágenes de los primeros días de Gala en su casa. “Me habrán contado, descrito y hablado cientos de miles de veces lo que se siente al ser madre, definitivamente hay que vivirlo para sentirlo porque es inexplicable”, expresó junto a una serie de fotos de la niña junto a sus padres.