Este año ha estado repleto de emociones para toda la familia Matamoros, en especial para Laura. Hace algunos meses la influencer anunció nuevamente su separación del chef Benji Aparicio y se enseñó completamente a gusto con su nueva vida; incluso se fue de viaje a la costa junto a sus pequeños hijos y algunos amigos.
Sin embargo, Marbella se convirtió en el escenario ideal para que Laura Matamoros y el padre de sus hijos se reconciliaran por por completo. Tras arreglar sus diferencias, la pareja aprovechó los últimos días de verano. A pesar de que todo se veía controlado, durante la noche de ayer la influencer sorprendió a todos sus seguidores al compartir una imagen donde se la podía ver toda vendada: “Hoy estoy así, voy a descansar unos días y os cuento todo”.
Fiel a su palabra, el día de hoy Laura Matamoros confesó que se sometió a una intervención estética. "Con los dos embarazos, cambios brucos de peso y al no llevar la antigua prótesis del músculo, no estaba cómoda" comenzó explicando la hija del tertuliano a sus seguidores: "Reduje el tamaño de mi pech*".
Tras confesar lo que la llevó a pasar por la cirugía, Laura Matamoros explicó que no se sentía cómoda con el tamaño del frente de su silueta y que había estado lidiando con esto desde hacía ya mucho tiempo, pues no era un inconveniente solo a la hora de vestir, sino que le causaba mucho dolor de espalda. "Hemos reducido un poco más de una talla. Y la forma de la prótesis también se ha cambiado para dar así un aspecto más recogido" finalizó la influencer.