Victoria Federica pensaba que este fin de semana que pasó podría ser uno de los mejores en el último tiempo. La hija de la infanta Elena ratificaba su lugar entre las celebridades del país, ya que había sido invitada a la Gala Starlite, una de las citas más importantes del verano, en Marbella. Sin embargo, la ceremonia terminó transformándose en uno de los momentos más incómodos que haya tenido que pasar.
La sobrina del rey Felipe llegó a la alfombra roja haciendo gala de su estilo y maravillando a todos. No dudó en posar ante las cámaras con una sonrisa, luciendo un vestido paillettes de colores que parece sacado directamente de la década del 70 y que es confeccionado por la firma Amen.
Lamentablemente para Victoria Federica, la elección del vestido no tuvo la repercusión que ella esperaba. Aunque fue destacado por los presentes, rápidamente todos cayeron en la cuenta de que era el mismo diseño que también lucía Gunilla von Bismarck, otra de las invitadas más importantes.
Sin dudas se trató de un momento muy incómodo para Victoria Federica, que tuvo que ver como su elección era opacada y disminuida por ser la misma que otra de las invitadas. Aunque no haya pasado a mayores, no deja de ser un traspié para una persona que piensa en cada detalle y que ha dejado sin palabras a todos los presentes.