Hace dos años, Tamara Falcó compraba su primera casa: una vivienda en Puerta de Hierro en la que dispone de todo tipo de lujos y comodidades. Sin embargo, aún no puede disfrutar de sus instalaciones y comenzar una nueva vida, ya que aún el hogar no se encuentra en las condiciones que ella quisiera.
El motivo por el que aún no se ha mudado de casa es por las reformas y modificaciones que la marquesa de Griñón deberá hacer frente para que su nueva vivienda quede por completo a su gusto. De modo que, Tamara Falcó tendrá que esperar unas semanas más antes de recoger las llaves y mudarse de manera definitiva a este magnífico piso situado en una exclusiva zonas de Madrid.
Claro que no se encargará ella sola de la decoración y las reformas. Tamara contará con la colaboración de profesionales en diseño de interiores y paisajistas, quienes deberán analizar primero el terreno para poder evaluar cuáles son las modificaciones más adecuadas para aconsejar a la hija de Isabel Preysler.
Tamara Falcó solo piensa en mudarse luego de tanta espera y abandonar el piso que alquila actualmente en Madrid junto a su pareja, Íñigo Onieva. Este nuevo hogar de grandes dimensiones contará además con privilegiadas zonas comunes, tales como un spa, gimnasio y piscina. Pero no será hasta que termine las reformas para que la marquesa de Griñón pueda contar con la casa de sus sueños.