La vida de Julio Iglesias se encuentra repleto de situaciones que valen la pena conocer y que sirven para enseñar cómo es la familia de uno de los cantantes más importantes de todos los tiempos. Una de ellas, la que más ha llamado la atención es, sin dudas, el vínculo entre el músico y Enrique Iglesias.
Esta disputa comenzó hace muchos años atrás, cuando Enrique Iglesias había decidido probar suerte en la música. Para eso, le había pedido dinero prestado a Elvira, la persona que lo había cuidado desde pequeño; con esto, presentó una maqueta con el pseudónimo de Enrique Martínez a muchas productoras de música latina. El problema surgió porque lo había hecho sin el aval de Julio Iglesias.
Cuando su padre se enteró de lo sucedido, se enfadó y emitió todo tipo de invectivas hacia su hijo. El propio Enrique confesó que su padre, con el orgullo resentido, le había dicho que no iba a conseguir ninguna cosa sin él, que lo que había escuchado en el disco era un desastre que no podía gustar a nadie y que no se iba a vender.
Aquel primer material presentado por Enrique Iglesias incluía algunas de sus canciones más reconocidas, como 'Experiencia religiosa' o 'Si tú te vas' y alcanzó a vender un millón de copias en solo tres meses. Ante esos números, la respuesta de Julio Iglesias fue expresar que el éxito del disco se debía solamente a que Enrique era su hijo, lo que significaba un ninguneo muy importante a todo el trabajo que se había realizado.
Con el tiempo, esta situación comenzó a quedar en el recuerdo y Julio Iglesias y Enrique se acercaron. Sin embargo, el vínculo entre ambos nunca fue tan bueno como se podría esperar y, al día de hoy, estos se mantienen distantes. Si bien aclaran que se tienen mucho cariño y que hablan seguido por teléfono, es evidente que todavía quedan cosas por sanar y que el orgullo del exesposo de Isabel Preysler hace que no pueda pedirle disculpas a su hijo.