En las últimas horas la salud de Rocío Flores preocupó a propios y extraños. Es que la mediática hija de Rocío Carrasco fue hospitalizada de urgencia en la jornada del jueves debido a un mareo que la dejó muy débil de salud. La hija de Antonio David Flores no quiso ahondar en los detalles del episodio asegurando que llegado el momento desvelaría los motivos de su inestabilidad corporal y tranquilizó a sus más de 784 mil seguidores en redes sociales. Sin embargo, un mensaje que no fue cien por ciento desvelado, habría iniciado los rumores de un posible embarazo puesto que los síntomas que padecía eran similares a los del período de gestación.
En esta línea, Rocío Flores día a día comparte en su cuenta oficial de Instagram los pormenores de su vida privada, por lo que deja salir a la luz las cosas buenas y malas que le suceden en el cotidiano. Por esta razón, la influencer se disculpó con los cibernautas donde confesó: "No he podido hacer vídeo ni fotos. Me ha dado un pequeño mareo y me he tenido que tumbar mientras ellos se regocijaban de sus tortitas. Paro a la próxima lo grabaré todo bien y os lo pondré". Acto seguido, posteó una historia en la que se excusó con sus admiradores, pero prefería contar los detalles en otra ocasión ya que seguía con las secuelas del inesperado episodio de salud.
Cabe recordar que Rocío Flores mantiene un vínculo sentimental desde hace ya un largo tiempo con Manuel Bedmar y en reiteradas oportunidades enfatizó en que le gustaría ser madre a corta edad. No obstante, a principios de año, especialistas en materia del corazón le consultaron sobre posibles planes de casamiento y la llegada de hijos, a lo que la muchacha aseveró que le gustaría, pero que no era el momento debido a sus compromisos laborales.
Finalmente, hace instantes, Rocío Flores despejó toda clase de especulaciones sobre la supuesta llegada de un heredero al clan Carrasco-Flores y dio a conocer el real diagnóstico que le generaron las complicaciones médicas. Se trata de "amigdalitis pultácea", una afección que la tiene alejada de sus actividades cotidianas al punto tan de no poder ni siquiera hacer uso de la voz. Por tal motivo quedan descartadas las probabilidades de un descendiente, al menos por ahora. Eso si, la nieta de Rocío Jurado deberá mantener reposo durante 72 horas y deberá acompañar su recuperación con alimentos líquidos y templados para favorecer el paso de los mismos por la zona afectada.