El miércoles 29 de septiembre de 2021 fue el peor día en la vida de Agustin Pantoja. Es que ese día, fue el día que visitó el tanatorio donde se incineraron los restos de su madre, Doña Ana, sin la compañía de su hermana, Isabel Pantoja. Los únicos acompañantes fueron el círculo más íntimo de amigos de la familia. El hermano de la artista no dio declaraciones de ningún tipo, de hecho, ni siquiera bajó la ventanilla del coche en el que iba sentado en el asiento de copiloto.
Cuando ingresó por una de las puertas laterales del tanatorio, se lo pudo ver claramente triste, cabizbajo, aunque con la cara oculta tras una mascarilla y gafas oscuras. Al salir, la historia fue la misma: sin declaraciones, Agustín Pantoja se subió al carro de sus colegas y partió con los restos de su madre.
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Todo esto transcurrió apenas después de las 22 hs del día miércoles, a pocas horas de reencontrarse con su sobrino, Kiko Rivera, quien lo demoró y con el que ya tuvo un juicio por apropiación indebida, estafa y administración desleal. Los otros nietos de Doña Ana, Anabel Pantoja e Isa, fueron directamente a Cantora para acompañar a la cantante.
Los hijos de Isabel Pantoja estaban en La Graciosa cuando se produjo el triste desenlace de Doña Ana, pero no dudaron en coger un vuelo y hacerse presentes en Cantora durante este difícil momento.