De un momento para el otro, la realidad de Ainhoa Arteta (56) se convirtió en un completo caos. Hace unas semanas, la vida de la cantante lírica estaba en peligro luego de que debiera ser hospitalizada a causa de una sepsis. Afortunadamente, Arteta se encuentra recuperándose en su casa, pero la puerta a su vida privada ya había sido abierta.
Su ex esposo, Matías Urrea, comenzó a hablar sobre su relación con la artista, y fue la comidilla en el plató de programas como Sálvame. A su vez, Belén Esteban (47) se dirigió directamente a la hija de Ainhoa, Sarah Croft (21), y la acusó de “topo” puesto que, supuestamente, Sarah estaría contando cosas de su madre muy comprometidas a sus espaldas.
Ahora, la joven no se ha quedado con los brazos cruzados y ha roto el silencio en Socialité para limpiar su nombre, decidida a contrarrestar las palabras de la de Paracuellos. “Yo no sé qué le habré hecho a Belén Esteban. Yo la tenía como un ídolo. Ella siempre ha defendido a su hija, pues ha hecho daño a una niña” expresó la celebridad.
A Sarah le ha pillado por sorpresa todo este escándalo y se ha sincerado sobre cómo está llevando ser señalada continuamente: "No sabes cómo estoy, destrozada, callada porque sé que es lo mejor que puedo hacer. Se me ha hecho mucho daño sin hacer nada" concluyó Croft, lanzando un último dardo a Esteban.