Es probable, casi seguro, que Elena Furiase y Gonzalo Sierra se conocieran desde su infancia. Gonzalo no solo es vecino de la familia Flores, sino que además es íntimo amigo de Guillermo Furiase, a quien conoce desde niño y con quien ha montado un grupo musical que no solo llegó a grabar un álbum, sino que tuvo una gira por España. Por eso, podemos afirmar que alguna vez el muchacho y la muchacha se habrán visto, conversado o incluso compartido momentos juntos. Sin embargo, no fue hasta el 2016 o 2017 ( no está clara la fecha) que uno de ellos se fijó en el otro.
No hay muchos detalles al respecto, solo se sabe que Guillermo fue el gran responsable de ese acercamiento. Elena y Gonzalo suelen ser reservados y por ese mismo motivo, mantuvieron la relación en el plano más íntimo de la familia, de su entorno. No querían que se supiese en los medios, no querían transformarse en una pareja mediática bajo ningún punto de vista. De más está decir que sus deseos no se cumplieron.
Tanto fue el empeño que pusieron en guardar el secreto, que primero se filtró la noticia del embarazo de ella, antes que la de su relación. Cuando Lydia Lozano reveló que Elena estaba esperando un hijo, la mayor de la familia Flores tuvo que reconocer su noviazgo y la llegada de su primogénito. "Dado que algunos se han adelantado a dar una noticia que intenté llevar con cuidado y prudencia, voy a aclarar que sí, vamos a ser padres, estamos felices y solo pido respeto por estos momentos tan delicados que me gustaría llevar con tranquilidad y calma", expresó en su cuenta de Instagram.
De esta forma, Elena Furiase y Gonzalo Sierra se transformaron en una de las parejas más conocidas y queridas de toda España, tirando por la borda todos los miedos y reparos que tenían sobre que su relación se hiciera pública. Más tarde pusieron un negocio juntos, se mudaron y llegó Noah, su bebé, quien les dio el último empujón para que plasmaran su amor y se juraran compañía y fidelidad para toda la eternidad.