Es común que, cuando un jugador de fútbol se instala en una ciudad, sus esposas se junten y formen un vínculo fraternal. Por ejemplo, es sabido que Antonela Roccuzzo forjó una gran relación con Daniella Semaan, esposa de Cesc Fábregas, Elena Galera, pareja de Sergio Busquets, y Núria Cunillera, mujer de Xavi.
Sin embargo, a pesar de los grandes intentos en disimularlo, parece que la esposa de Messi jamás pudo congeniar con Shakira, y al dejar Barcelona para acompañar a su esposo en esta nueva etapa en el París Saint-Germain tuvo un gesto con la cantante colombiana que dejó bastante que desear.
Muchos especulan que la razón por la que Antonela y Shakira jamás pudieron convertirse en amigas es que la argentina es muy cercana a Nuria Tomás, la actriz que aún era la novia de Gerard Piqué cuando el futbolista se enamoró de la cantante de Barranquilla en el Mundial de Sudáfrica de 2010. Si bien Nuria pudo seguir adelante con su vida, casándose en 2020 con el empresario Agus Puig Gibernau, con quien además tuvo un hijo meses más tarde, parece que Roccuzzo decidió serle fiel a su amiga y no estrechar lazos con la mujer con la que su pareja del momento le fue infiel.
En cuanto al desagradable gesto que la rosarina tuvo con con Shakira, trascendió durante las últimas horas, que Roccuzzo organizó una mega fiesta de despedida en su casa para decirle adiós a Barcelona y a todos sus amigos cercanos ya que se mudarían a París por el nuevo trabajo de Messi en el PSG. Sorpresivamente, en la lista de invitados no figuraron ni la artista ni Piqué.
"Hizo un fiestón por todo lo alto en su casa de Barcelona, a la que acudieron amigos y muchos de sus compañeros del equipo azulgrana, aunque entre ellos no estuvo Gerard Piqué ni Shakira", contaron en la Semana, la revista del corazón y prensa rosa, dejando muy a la vista que jamás existió la posibilidad de que las esposas de los deportistas se lleven bien, y menos ahora que ya nada las relaciona.