Luego de seis meses de un estricto estado de emergencia, los ciudadanos españoles por fin pudieron salir a las calles a festejar el fin del toque de queda. Sin embargo, muchos jóvenes abusaron de esto y realizaron fiestas con grandes conglomerados de gente. Esto causo que la policía interviniera, generándose algunos disturbios.
A partir de esto, varias celebridades decidieron hablar, ya sea por redes sociales o frente a cámaras, y concientizar sobre lo grave que puede llegar a ser contagiarse de coronavirus nuevamente, puesto que la COVID-19 sigue circulando aunque la situación esté más controlada. Y mientras toda la población no esté vacunada.
El periodista Carles Francino, por ejemplo, reveló en La Ventana, su programa de Cadena Sur, que la había pasado fatal por culpa del virus, con fiebre muy alta y falta de oxígeno. Experiencia que se complicó aún más al sufrir un ictus. Como consecuencia, Francino ha perdido siete kilos, masa muscular y hasta la voz.
Fernando Guallar –quien por estos días brilla interpretando a Mauricio Ambrosi en Luis Miguel: la serie- hizo eco de esto y compartió en su cuenta oficial de Twitter e Instagram (@fernandoguallar) que, a sus 32 años, esta hace cuatro meses en tratamiento por una trombosis pulmonar que el COVID-19 le había causado, llamando a que la juventud lo piense dos veces antes actuar de manera irresponsable.