A principios de este año, más específicamente el 2 de marzo, el país entero quedó en shock luego de recibir la noticia de que Álex Casademunt había fallecido a sus 39 años tras un accidente de tránsito. Con la inesperada muerte del cantante -que había saltado a la fama en 2001 después de participar en la primera edición de Operación Triunfo- muchos proyectos quedaron truncos.
Uno de ellos fue SonSocks, una marca de divertidos y coloridos calcetines que había comenzado junto a su novia y socia, Judit Puig, situada en Barcelona y que tenía como objetivo elaborar artesanalmente prendas que se destacaran por su calidad y durabilidad.
Judit se vio muy afectada con el repentino fallecimiento de Álex, por lo que decidió alejarse de la esfera mediática, lo que incluyó cerrar la página oficial del emprendimiento que compartía con su pareja, y mantener un perfil bajo. Sin embargo, el tiempo sabe curar las heridas y es así que Puig decidió retomar el último sueño empresarial de Casademunt.
"Por fin está pasando: hemos vuelto" es el mensaje que recibe ahora a los visitantes de la página web de la marca, que vuelve a admitir pedidos. Un regreso que confirma también la revista Semana, que en sus páginas asegura que "se ha dado luz verde de nuevo a esta empresa, por lo que los clientes que lo deseen pueden adquirir estos productos en los que Álex Casademunt puso tanto amor".