Ya es habitual que los medios se hagan eco de las inesperadas ausencias de Jorge Javier Vázquez. Siempre se habló de "temas de salud", jamás hubo demasiados detalles y la prensa no supo si preocuparse o pasarlo por alto. Además de sus obligaciones televisivas, el presentador tiene sus deberes teatrales: protagoniza Desmontando a Séneca. Pero, ¿será que el presentador ya se aburrió del éxito teatral y elige suspender funciones solo porque sí?
Algo de eso podría haber. Jorge Javier suspendió su última función y faltó a la tele. Pero fue visto bailando en una discoteca. ¿Qué clase de enfermedad uno puede tener que le impida salir en televisión y cumplir con sus compromisos laborales, pero sí le permitan ir a una discoteca a bailar? Bueno, según el presentador, un leve cuadro de laringitis.
"Que no cunda el pánico. Laringitis aguda, diez días fuera de servicio", había escrito el presentador, antes de ser visto en una disco. Es que los videos son demasiado incriminadores. Se lo ve a Jorge Javier no solo bailando, sino que incluso cantando a viva voz. Su fama le jugó una mala pasada y no pudo tomarse esos días que, vaya a saber por qué, necesitaba tomarse.
El problema no es la televisión. Allí se puede alegar una excusa y faltar. El plantel de colaboradores de Sálvame es numeroso y su presencia puede ser suplantada sin problemas un par de días, más allá de que es una figura de primer nivel. El tema es el teatro: la gente paga una entrada por adelantado, apuesta a un servicio cultural y espera recibirlo en el tiempo y la forma acordados. Jorge Javier decepcionó a sus fans y hasta se justificó: "una laringitis no me va a impedir salir a bailar".