La cancelación de 'Ya son las ocho' ha causado una conmoción importante. La manera en la que se han dado las cosas, el buen momento que atravesaba el programa en cuanto a audiencia y repercusión mediática, y las versiones cruzadas sobre el futuro de muchos de sus integrantes, evidenciaron que detrás de esta decisión de Telecinco podía haber algo mucho más importante que un simple cambio de verano.
En sus inicios, 'Ya son las ocho' se valió de la repercusión que estaba teniendo Marta Riesco por su romance con Antonio David Flores y aprovechó el tirón para posicionarse en la vereda contraria a Rocío Carrasco. Si bien nunca se terminó de blanquear esta estrategia, lo cierto es que la contratación de Gloria Camila y Rocío Flores, y el hecho de tener a alguien hablando maravillas de Antonio David, hicieron que fuera difícil sacar esa idea de la cabeza del público.
Sin embargo, no fue esa postura la que terminó sellando el destino del programa, sino lo ocurrido con la famosa supuesta llamada de Rocío Carrasco a Marta Riesco. 'Ya son las ocho' no solo fue el lugar en el que la reportera juró y perjuró que la de Chipiona había querido contratarla, sino que también incentivó el conflicto entre ambas partes, lo que ha llegado a permitir que se deslizaran ciertas ideas sobre personas importantes de la emisora, calificándolas como mentirosas.
La reacción de Telecinco emitiendo un comunicado en el que directamente prohibían mencionar el tema o hablar del romance de Antonio David Flores y la periodista, evidenció lo mal que había caído entre algunos pesos pesados. Por eso no sería extraño que se haya optado por una salida decorosa, es decir, relegar a Marta a un segundo plano, al menos mientras dure su contrato, y así excusarse en el verano para sacar el programa del aire sin hablar de una posible vuelta.
Es un hecho que 'Ya son las ocho' saldrá de la pantalla de Telecinco y faltan detalles para confirmar que no regresará a ese lugar. El cuatro de julio parece ser la fecha indicada para que esto suceda, cediendo su lugar a otra edición de 'Sálvame', un detalle que, teniendo en cuenta el contexto, ha terminado siendo muy significativo.