Lucas Mesa, un pequeño cantante barcelonés de 11 años, emocionó al público presente en el plató de La Voz Kids cuando fue escogido en el último segundo de su interpretación en las audiciones a ciegas y estalló en llanto.
Es difícil de imaginar qué siente un niño cuando se encuentra solo sobre el escenario cantando un tema que ha practicado miles de veces, pero nunca ante un jurado tan exigente como el de La Voz Kids. Mucho menos podemos figurarnos qué pasa por la cabeza de ese chico cuando avanza en su interpretación y ve que ninguno de los cuatro coaches lo elige. Nadie presiona el botón que determinará su destino. Eso fue lo que vivió el joven y talentoso Lucas Mesa.
La propuesta de este niño fue Seven Years, la canción de la banda pop danesa Lukas Graham. Comenzó muy bien, afinado y acertado en sus vocalizaciones, más aún teniendo en cuenta la dificultad extra de cantar en inglés. Los coaches de La Voz Kids compartían elogios, pero nadie presionaba el botón. Lucas Mesa avanzaba y llegaba al clímax de su interpretación. Mucho suspenso. Su familia miraba expectante, con mezcla de admiración por su actuación y, al mismo tiempo, miedo de que no fuera elegido.
Finalmente, en el último segundo de la canción, cuando parecía que nadie escogería a Lucas Mesa, alguien presionó el botón: Melendi. Instantáneamente, el artista asturiano abandonó su asiento para ir a abrazar al pequeño, que rompió en llanto y se aferró con fuerza a su nuevo coach bajo una lluvia de aplausos. Pudo haber sido un triste momento para el joven cantante por la frustración de no haber sido elegido, pero se convirtió en uno de los momentos más emocionantes de su vida y, al mismo tiempo, en el comienzo de un nuevo camino artístico en la pantalla de La Voz Kids.